Arte y orgullo
Registros Cordaineros 2016
El tercer disco de larga duración de los Hermanos Cubero constituye toda una declaración de principios, aunque no hacía ninguna falta, ya que Enrique y Roberto Ruiz Cubero proclaman desde el primer tema del CD, titulado Quién electrificaría su alma?, lo siguiente: “Estas son nuestras armas / mandolina y guitarra / para quien quiera escucharlas / ¿quién electrificaría su alma?”.
Y así es. Con estos dos únicos instrumentos de cuerda -no electrificados, evidentemente- y con la compañía de sus voces, los dos músicos de la Alcarria, (provincia de Guadalajara) y residentes en los alrededores de Barcelona, consiguen dibujar con maestría un repertorio tradicional basado en las melodías populares de su tierra, sobretodo la jota castellana, vistiéndolo con unas tonalidades que lo acercan estilísticamente al blue grass de las lejanas montañas de los Apalaches norteamericanos. Una jugada perfecta, que ha atraído a públicos modernillos que, en principio, no deberían tener nada que ver con el sabor primigenio de su música, y que ha colocado a los dos hermanaos en carteles de festivales imposibles para muchos otros grupos de similares características.
Ahora bien, contemplar a los Cubero sobre un escenario, sea el que sea, con sus trajes tan bien tallados, como si fueran jefes de planta de El Corte Inglés, y explicando sus peculiares chistes familiares entre canción y canción, no tiene precio. Y más si interpretan magníficas jotas como la tradicional Ya se está poniendo el sol, o la muy irónicamente reivindicativa Trabajando para la MCA, un tema de cosecha propia. Esto sí que es arte, no trabajo, y pueden estar bien orgullosos.
(Esta reseña apareció originalmente en lengua catalana en el número 36 de la revista de música y cultura popular Caramella.)
El tercer disc de llarga durada dels Hermanos Cubero constitueix tota una declaració, tot i que no hi feia cap falta, ja que Enrique i Roberto Ruiz Cubero proclamen des del primer tema del CD, titulat “Quién electrificaría su alma?”, el següent: “Estas son nuestras armas/mandolina y guitarra/para quien quiera escucharlas/¿quién electrificaría su alma?”.
I així és. Amb aquests dos únics instruments de corda -no electrificats, evidentement-, i amb la companyia de les seves veus, el parell de músics de l’Alcàrria (província de Guadalajara) i residents a le rodalies de Barcelona aconsegueixen dibuixar amb mestria un repertori tradicional basat en tonades populars de la seva terra, sobretot la jota castellana, vestint-lo amb unes tonalitats que l’apropen estilísticament al blue grass de les llunyanes muntanyes dels Apalatxes dels Estats Units. Una jugada perfecta, que ha atret a públics modernets que en principi no hi haurien de tenir res a veure amb el sabor primigeni de la seva música i que ha colocat als dos germans en cartells de festivals impossibles per molts altres grups de les seves caracterísques.
Ara bé, contemplar els Cubero damunt un escenari, sigui el que sigui, vestits amb els seus trajos tan ben tallats de cap de planta de El Corte Inglés i explicant els seus peculiars acudits familiars entre cançó i cançó, no té preu. I més, si interpreten magnífiques jotes com la tradicional “Ya se está poniendo el sol”, o la molt irònicament reivindicativa “Trabajando en la MCA”, de collita pròpia. Això sí que és art, no feina, i en poden estar ben orgullosos.
