Diariofolk

El badalonés Toni Saigi es hijo de Toni Saigi “Chupi”, un veterano teclista todoterreno especializado principalmente en el órgano Hammond que ha tocado en multitud de proyectos, desde el jazz rock de la ona laietana hasta el pop rock de Els Pets pasando por el funk. Pero el vástago parece haberse decantado -al menos por el momento- por un jazz más clásico y así lo ha puesto de manifiesto en su primer disco en solitario al frente del cuarteto Tronik.

Bajo el curioso -e intraducible- nombre de La Prinsire de la Sal, este CD se compone de una colección de temas propios en los que el pianista, a pesar de su juventud, echa la vista atrás para inspirarse en el jazz de los años cincuenta y sesenta, y concretamente en la obra del maestro Thelonius Monk, para ponerlo al día con una nueva lectura que la aporta aires contemporáneos.

Completan el grupo otros tres prometedores músicos de la cantera catalana: el excelente saxofonista Jaume Ferrer, que en su caso bebe en las fuentes de otro clásico, Sonny Rollins, y una sección rítmica que ya hace tiempo que trabaja en equipo compuesta por Marc Cuevas al contrabajo y el argentino Carlos Falanga a la batería. Precisamente, Cuevas también editó un disco el año pasado, Carta Blanca, en el que contaba con la presencia de Saigi y Falanga.