Jamboree Jazz. Barcelona.
Carles Benavent (Barcelona, 1948) es uno de los bajistas más personales que podemos encontrar en el mundo del jazz. Su estilo se mueve lejos de ese modelo dominante en el que destacan Stanley Clarke, Marcus Miller o Victor Wooten, bajistas muy dados a la piroctenia y la abundancia de sonidos eléctricos. Como quedó plasmado en sus recientes conciertos del Jamboree, su concepción de la fusión en el jazz es bien diferente.
El trío de Benavent abrió su último concierto en el club de jazz de la Plaza Real con una contagiosa “¿Bailas?”, para pasar de inmediato a una serie de homenajes a Jaco Pastorius (precioso dúo entre el bajista y su baterista, Roger Blàvia), a Frederic Mompou -con una delicadísima participación del pianista Roger Más exprimiendo las posibilidades de “Scenes D´enfants (Jeunes Filles Au Jardin)”- y a Paco de Lucía (extraordinaria versión de “Zyrab”). Perfectamente conjuntado, el grupo hizo gala de un estilo directo, impregnado de perfumes flamencos y con una rica interacción entre sus componentes.
A continuación, se sumó Giulia Valle (San Remo, 1972), talentosa contrabajista y compositora que se reconoció influida por la música de Benavent. Comenzaron revisitando a Chick Corea y continuaron con dos composiciones de Valle: “Tiempos que vuelan” (estrenada esa misma noche) y “Chacarera búlgara”. El cuarteto sonó de maravillas, extendiendo sus acentos étnicos y brillando con unos diálogos chispeantes entre los dos instrumentos de cuatro cuerdas.
El broche de oro llegó con “Alegrías de Cádiz” y un inspiradísimo Benavent pulsando su bajo Barcelona (diseñado especialmente para él por Jerzy Drozd) con un duende increíble. Esperamos que este encuentro entre la contrabajista y el trío de Benavent vaya más allá de esta cita puntual en el Mas i Mas. Juntos, tienen mucho para darnos.
Foto: Carles Benavent por S.Z.