Locura total
Sony Music 2015
El músico argentino que brilló especialmente en los ochenta y los noventa se acerca a los sonidos del Brasil de la mano del cantautor carioca Paulinho Moska para firmar su tercer disco a cuatro manos tras los recomendables La la la (con Spinetta) y Enemigos íntimos (con Sabina).
A Fito Páez –que ya había declarado su amor por la música del país vecino (ahí está su Rumba del piano nada menos que con Caetano Veloso)– le sienta muy bien este paréntesis en una trayectoria que desde hace ya mucho tiempo estaba adoleciendo de cierta falta de inspiración. Moska, que ha compartido escenarios con músicos de la escena rioplatense como Jorge Drexler, Pedro Aznar y Kevin Johansen, sintoniza bien con el rosarino en su regreso a los estudios de grabación tras su doble Muito pouco (2010) y su directo, Muito pouco para todos (2013).
En los doce cortes –producidos impecablemente por Liminha (Caetano Veloso, Gilberto Gil, Arnaldo Antunes, Jorge Ben Jor…), registrados en Buenos Aires, Río de Janeiro y Miami, y cantados en portugués, español y portuñol– hay buenas canciones como las cercanas a la música popular brasileña Impossível escreber sobre nada, Filhos do amor, Locura total, Nuestra historia de amor, Garota muchacha o Flores de abraços, la balada Adiós a las cosas, la marchosa O sol ainda será brilhante (muy del estilo de Páez) y las agradables Hermanos y Mais que tudo que existe (ambas con un fresco aire pop). Onde você pasó a noite tiene un toque funky que hace recordar a Ed Motta, y Milagros y heridas es quizás lo más olvidable del álbum (enésimo ejercicio rockero de Páez retratándose como un edonista pasado de vueltas).
Locura total cuenta con dos ediciones diferenciadas por tres temas: en una de ellas estos aparecen cantados en portugués y en la otra, en español.
Un álbun recomendable en el que ambos músicos consiguen potenciar sus talentos y sus influencias de un modo natural y seductor. Un trabajo que servirá para que más de uno se reconcilie con la producción de Fito Páez.