Contrarreloj
Youkali Music 2017
Han pasado ya varias décadas desde que el jazz y el flamenco comenzaron a ir de la mano, cuando pioneros como Pedro Iturralde, Paco de Lucía o el mismísimo Miles Davis empezaron a dar forma a lo que ya es un género en sí mismo.
Más tarde, una inabarcable nómina de artistas, encabezados por Jorge Pardo, Chano Domínguez o Javier Colina, consolidaron el género y lo elevaron a la inmortalidad con obras y formaciones míticas.
Sin embargo no han sido muchos los trompetistas que han buceado en el jazz más flamenco. Entre ellos podemos nombrar a Ernesto Chulia, Ángel Sánchez y, destacando sobre todos ellos, el joven Enriquito.
El trompetista, arreglista y compositor manchego Enrique Rodríguez “Enriquito” acaba de grabar Contrarreloj, su tercer disco, un título que refleja la inquietud del músico por el tiempo, por la sinrazón de la prisa que no nos permite disfrutar de las cosas sencillas de la vida; una reivindicación de la calma y el sosiego, al menos para poder disfrutar de la música.
Acompañan a Enriquito en este viaje grandes intérpretes como Rycardo Moreno en la guitarra flamenca, Jesús Bachiller “Bachi” en el bajo eléctrico, Manu Masaedo y Kike Terrón en las percusiones, Lisandro Mansilla en los saxos y José María Pedraza “Petaca” en los teclados. Para el último corte del disco, Bajando del mirador, ha reunido además a colaboradores de lujo como Josemi Carmona en la guitarra flamenca, Pablo Martín Caminero en el contrabajo y Bandolero en la percusión.
En este tercer trabajo de Enriquito, influenciado por dioses de la música como Miles Davis, Chick Corea, Paco de Lucía o Chet Baker, el flamenco no le habla de tú a tú al jazz, como en sus primeras grabaciones, pero sí contagia a gran parte de sus composiciones y se mantiene siempre presente en un segundo plano. En el plano del jazz transita los caminos de Miles Davis a Chet Baker, pero se mantiene siempre más próximo a este último (escuchen La Verbena para comprobarlo).
Como sus discos anteriores, Contrarreloj está publicado por Youkali Music que, con más de 120 referencias en su catálogo, no deja de apostar por el inmenso talento que atesoran nuestros jazzistas, olvidados ya los complejos del pasado.
Si con sus anteriores trabajos, Me quito el sombrero (2011) y Alcudia (2014), hablábamos de proyección de futuro, con Contrarreloj estamos ante la confirmación plena de un gran artista al nivel de nuestros grandes músicos de jazz de las últimas décadas.