Diariofolk

Nacida en el seno de una familia desestructurada, en la que padeció abusos, Sinéad no lo tenía fácil para disfrutar de una trayectoria normal. Y así ha sido, pero por muy diferentes motivos. La calidad de su voz y su sensibilidad musical la condujeron haca el camino del éxito: en 1990, la canción Nothing compares 2 U, original del norteamericano Prince -que, por cierto, en el libro no merece una buena consideración, ni mucho menos-, la catapultó hacia las estrellas. Pero, una vez en el olimpo, no se sintió muy cómoda. Su aspecto iconoclasta, su implicación en diversos incidentes y, sobre todo, su famosa aparición en la televisión rasgando una foto del papa Juan Pablo II, la condenaron a uno ostracismo más o menos premeditado, o deliberado, del que no ha salido, o no ha querido salir, ya que su papel de outsider se ha ido incrementando: su especial espiritualidad la ha llevado a simpatizar con el rastafarismo y a comulgar con el islam, llegando a cambiarse el nombre. Ahora se llama Shuhada Davitt.

Escrito en un tono bastante caustico, propio de una persona insatisfecha, la narración de esta autobiografía finaliza en 1992. Después, su autora nos habla de los discos que ha editado, que son diez, aparecidos entre 1987 y 2014, y de sus cuatro hijos, tenidos con padres diferentes. El tercero de ellos se suicidó a principios de 2022, un hecho que le provocó otra grave crisis.

Remembranzas – Sinéad O’Connor
Libros del Kultrum, 2021