Diariofolk

El golpe de Estado que derrocó al gobierno de Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973 marca el inicio de la etapa más oscura de la historia de Chile. A 50 años de aquel luctuoso suceso, el cantante, multiinstrumentista y compositor Nano Stern edita Nano Stern canta a Víctor Jara, un trabajo en el que interpreta exclusivamente canciones del gran artista chileno asesinado por la dictadura pocos días después del asalto al Palacio de la Moneda, sin duda un referente ineludible de la música popular latinoamericana del siglo XX.

Stern lleva editada una decena de discos con composiciones propias, pero es la primera vez que dedica íntegramente un álbum a la obra de otro artista. La decisión está bien fundamentada: Víctor Jara es un artista al que viene interpretando desde sus inicios y al que considera piedra fundacional no sólo de su canto, sino también de su ética.

Temas emblemáticos como Te recuerdo Amanda, El cigarrito, Luchín y Manifiesto suenan aquí desde la desnudez y la austeridad de la guitarra y la voz. Stern logra llevar la poesía de estas canciones a un primer plano, volviendo a un Víctor Jara inicial e íntimo. No se limita a grabar covers: va en busca de la esencia de las canciones de Jara y las traslada a una nueva dimensión, interpretándolas con su propia voz y su estilo característico. Crea así una nueva experiencia musical que da cuenta de la potencia del legado artístico, el compromiso social y la vigencia del gran cantautor.

El álbum –recientemente lanzado en plataformas digitales– fue grabado en directo en el Aula Magna de la Universidad de Santiago de Chile, lugar en el que Jara trabajaba como profesor y músico. El proyecto es una colaboración entre el artista, la Fundación Víctor Jara y esa Universidad.

Nano Stern nació en Chile en 1985. Ya a los 3 años empezó a tocar el violín y en su adolescencia armó bandas de rock donde combinaba lo eléctrico con el violín y también con instrumentos más folclóricos, como quenas y charangos. Después de unos años de estudiar composición en el Conservatorio partió a Europa, donde se sumergió en la escena folk y fue descubriendo raíces y tradiciones musicales de las diferentes culturas del mundo, hasta que decidió volver a instalarse en Chile en 2012.

Hoy es uno de los músicos chilenos más importantes, reconocido por la potencia de su performance en directo, su talento como guitarrista y un fuerte compromiso social que lo tiene posicionado, además, como un líder de opinión pública en su país.  Es también uno de los artistas chilenos con mayor proyección internacional y mantiene un fuerte vínculo con la Argentina, habiendo colaborado con músicos de ese país como Pedro Aznar, León Gieco, Lito Vitale, Raly Barrionuevo, La Bomba de Tiempo, Teresa Parodi, Manu Sija, Kevin Johansen y Luciana Jury, entre otros.

En 2015 editó el aclamado Mil 500 vueltas, que cuenta con la participación de Jorge Drexler, Pedro Aznar, Marta Gómez, Susana Baca y Joan Baez, álbum que alcanzó un notable suceso en Chile. Al año siguiente, la Baez realizó un concierto multitudinario en Nueva York para celebrar su cumpleaños número 75 e invitó a Stern para interpretar Gracias a la vida, de la gran Violeta Parra.

Por estos días, el cantautor chileno se encuentra de gira mostrando este trabajo discográfico por diversos países de América Latina y de Europa, los Estados Unidos y otros rincones del mundo.