Tras varios años de parón musical, en 2017 regresaron los guipuzcoanos de Beasain con un interesante disco, Samhain, donde aunaban sus dos principales influencias musicales, la vasca y la “celta” El resultado es este disco, que evoca la principal fiesta pagana en el calendario celta, el Samhain, que celebraba la última cosecha y el reinicio del ciclo de la tierra. Briganthya reanudan así su ciclo musical.
Uno de los músicos vascos que mejor evoca la atmósfera irlandesa es Benito Lertxundi. En 1996 grabó Hitaz oroit. En un momento espléndido de creatividad musical, recuperaba una de sus más bellas canciones, Baldorba, dedicada a la población navarra.
En el segundo volumen de la recopilación Naciones Celtas (Fonomusic, 1998) se incluyeron algunos músicos vascos que más o menos se acercaron a la música celta. Entre ellos estaban el grupo Alboka e Ibón Koterón y Kepa Junkera. También celtas en Madrid, Caledonia.