Tras años buscando, escuchando y observando a su alrededor, Jorge ha construido su propio universo de manera casi involuntaria. Su proyecto, en el que la zanfona es el punto de partida, al que se suma un salterio eléctrico de fabricación propia. Algo tan poco convencional como un skate decorado con sus propias ilustraciones le ha servido para incorporarle cuerdas de contrabajo, consiguiendo así una sonoridad incomparable.
Normalmente Jorge cuenta con la voz de Elena Aranoa aunque en esta ocasión la sustituirá la jovencísima Alejandra Bartolomé. El repertorio, en gran parte tradicional, mantiene sus letras originales y va desde canciones populares de su tierra, La Rioja, a música sefardí, pasando por melodías recogidas en cancioneros antiguos.