Diariofolk

– ¿Qué nos espera en este disco que acaba de salir del horno?

–Un viaje de principio a fin con un mensaje positivo, reflexivo y profundo. Dada la temática, la resiliencia, era muy consciente para mí la importancia de trasmitir esa idea a través de la música. Es una mirada a mi mundo interior y al que me rodea. Me propuse hacer un disco más jazzístico que el anterior, pero en el que el componente de la canción estuviese también muy presente. Busqué redondear una obra más compleja a nivel de composición y producción. Todo salió de manera muy natural, el resultado fue muy orgánico.

– ¿Qué balance hace de ‘Short Stories’, su álbum anterior? ¿Podríamos decir que marcó un hito en su trayectoria como músico?

–Short… fue un disco que me aportó muchas alegrías. Obtuvo muy buenas críticas, hicimos muchos conciertos y vendimos muchos discos. Por la banda pasaron diferentes integrantes y la música fue creciendo de diversas maneras. La Short Stories Band tiene un carácter definible y reconocible, cosa que me hace muy feliz. Sí, fue un punto de inflexión en mi carrera… También porque por primera vez tuve que afrontar y liderar un proyecto en su totalidad.

– ¿Por qué ha titulado Resilience a este nuevo disco?

–Porque es un término con el que me identifico mucho por diferentes razones personales, y también por el momento que atravieso ahora en mi vida. Como decía antes, el disco es un viaje…. Y, como en la vida, no todo son momentos fáciles, pero esos momentos difíciles son los que nos hacen crecer para llegar a otros lugares más bellos. Esa es la idea básica y primaria del disco, pero a través de un proceso complejo, de reflexión. Los músicos que participaron en el disco eran muy conscientes de ese mensaje y los trasmiten a la perfección en cada tema. El jazz es una música resiliente por naturaleza, nace de la lucha y las dificultades para convertirse en lo que es hoy en día, más que un estilo, una forma de vida y unión entre las personas. Me gustaría que la gente, después de escucharnos, sienta que su corazón se llena de energía para seguir caminando con fuerza en la vida. Es lo que yo siento al leer los poemas y ver las imágenes que acompañan al disco.

– ¿Qué nos puede contar de los músicos que aquí lo acompañan?

–¡Que los amo…! [Risas] Bueno, son músicos que admiro profundamente. Con André Mota y André Ferreira, ya tocamos juntos hace cuatro años, el piano de Diogo Santos se incorporó al piano más tarde, ya en plena grabación de Short… Por último, en este proyecto, se unió João David de Almeida a la voz y percusiones. Los cuatro son de Portugal y son perfectos para mi música, no solo porque son unos tremendos músicos de la hornada joven de Lisboa, también porque hemos creado juntos un grupo humano único en nuestra forma de trabajar y vivir la música. Entienden y viven mi música tal y como yo la siento, llenos de trabajo, respeto, humildad, pasión y diversión. Compartimos un mismo viaje y unas mismas ganas de contar cosas. A esta banda se unen como invitados mis tres saxofonistas preferidos. Narciso González, saxo tenor, compañero de batalla desde hace muchos años, un amigo del que aprendo día tras día. Pedro Cortejosa, también tenor, un músico tremendamente inquieto con el que comparto, además, la pasión por la poesía, me siento muy cercano a su mundo musical y personal. Y por último, al saxo alto, Perico Sambeat, para mí es inspiración y un músico de referencia, ha sido un placer volver a grabar con él, una vez más me ha dejado sin palabras por su entrega, su musicalidad, su humildad… Ha hecho un trabajo maravilloso. Me siento muy afortunado de estar acompañado por tan buenos músicos y amigos. Un regalo.

–­En este nuevo disco volvemos a encontrar de alguna manera un reflejo de su actividad en el ámbito de la musicoterapia… 

–Sí, es inevitable. De ahí viene también un poco el título del disco. Hay un corte que dedico a Alba Guzmán, una chica con autismo con la que le grabamos recientemente un álbum [Desde mi mundo] en el que también colaboran Perico, la Short Story Band y Keke Martín entre otros. Ella y su familia son para mí un ejemplo de superación, de esa resiliencia de la que hablamos. La musicoterapia esta muy ligada al mundo del jazz: trabajamos a diario con la improvisación.

–El cuadernillo que acompaña al CD nos regala una selección de textos poéticos…

–Sí, hay textos, fotografías e ilustraciones. Ahí me ayudó mi amiga y coproductora, Isabel Sánchez Fernández, escritora y gestora cultural. Ella sabe de mi pasión por la poesía y me propuso acompañar mi música con poemas, fotografías e ilustraciones que estuviesen en sintonía con la temática del disco. Se puso manos a la obra y, de sur a norte y de oeste a este –para romper las rutas tradicionales–, se embarcaron con nosotros autores como Begoña Abad, Mar Benegas, Daniel Casado, José María Cumbreño, José Manuel Díez (el Duende Josele), Jose Luis Gutiérrez García, Elías Moro, Salvador Retana, Luís Filipe Sarmento, Juanjo Puerma, Raúl Vacas Polo, Álvaro Valverde y Patxi Zubizarreta. Como en mi disco anterior, el diseño gráfico estuvo a cargo de José Manuel Gamero Gil.

– ¿Cómo se llevó adelante la producción del disco?

–¡Eso ha sido lo más complicado, lo de sacar un disco es una auténtica locura! [Risas] Aun así, he tenido la gran ayuda de Isabel. Además, la Fundación Caja de Badajoz apoyó el proyecto con una pequeña aportación. El disco estará editado por Youkali Music. Estoy muy agradecido por todo el apoyo recibido.

– ¿Ya tiene fechas para presentar en directo el material de Resilience?

–El disco acabamos de estrenarlo en Alhaurín de la Torre, Málaga, donde el año pasado ganamos el III Concurso de Nuevos Talentos en el Portón del Jazz. Luego nos esperan Málaga, Lisboa, Madrid, Barcelona y diferentes festivales por Europa. Estaremos un par de años presentando Resilience en muchas ciudades y en diferentes contextos, a veces con los poetas que han participado en el álbum.

– En su diálogo anterior con Diariofolk, comentaba que tenía “en mente dos nuevas grabaciones” para las que ya estaba componiendo. Suponemos que Resilience es la materialización de uno de esos dos proyectos, ¿puede contarnos algo del otro?

–Bueno, hay muchas cosas en mente… El próximo proyecto es un disco a dúo con Diogo Santos, que si todo va bien lo grabaremos este verano. También estoy escribiendo para big band y para otro disco con la Short Stories Band. Y más cosas, pero paso a paso…