Circo Price, Madrid. Festival Inverfest 2018
Reaparecía el de Vigo después de un inolvidable concierto en Santiago de Compostela, en el que recreaba a la orquesta representada en el Pórtico de la Gloria, y en este caso lo hacía a lo grande, demostrando que cuando se empeña, no existe diferencia entre él y cualquier estrella del rock. Le recibía un potente despliegue de luces y sonido y una gran ovación de las 1400 personas que abarrotaban el Teatro Circo Price.
Su banda habitual está compuesta por excelentes músicos, algunos como Xurxo Nuñez a cargo de las percusiones y Pancho Álvarez con las cuerdas, que lo acompañan desde hace décadas. Completan el elenco la acordeonista Itsaso Elizagoien Bizente y el violinista canadiense Jon Pilatzke, todo un showman y excelente bailarín.
Núñez quiso comenzar con su flauta de pico, que al instante era replicada por las palmas del público, y en pocos minutos el escenario se llenó de gaiteras y gaiteros que lo arropaban. Esa sería la tónica de la noche, un montón de invitados que entraban y salían del escenario, tanto profesionales como alumnos de varias escuelas musicales.
En cuanto al repertorio, no pudo ser más variado en la larga noche musical que nos esperaba, con dos horas de concierto. Parte del directo sirvió para recordar A irmandade das estrelas, el álbum que colocó su estrella en el firmamento musical internacional y que recientemente celebraba sus 20 años. Hubo también tiempo para rendir tributo a Martín Códax y a Alfonso X El Sabio, arriesgada apuesta con un público que lo que más buscaba era dar palmas al ritmo de sus interpretaciones más calientes. Sonaron también temas de The Chieftains y varios popurrís de sus composiciones más conocidas.
Participó del espectáculo el músico e investigador gallego Abraham Cupeiro, con la reproducción de un carnyx celta que se ha encontrado en tierras gallegas, haciendo una entrada efectista detrás del público que luego se repetiría en varias ocasiones con otros músicos durante el concierto. También acudió a la llamada Maria Berasarte, para cantar maravillosamente Lela a dúo con Núñez a la flauta. Más tarde hizo su aparición el “Talao” Fernando Llorente, acompañado por otros dulzaineros, demostrando que gaita y dulzaina son dos instrumentos hermanos. El grupo madrileño de baile Irish Treble dejó boquiabierto al público y, finalmente, una innumerable pléyade de gaiteros de Escocia, Asturias, Irlanda, Galicia y Aragón remataron la faena.
Xurxo Núñez aportó el toque de humor haciendo percusiones con una maleta y disputando habilidades con el zapateado de Pilatzke, el violinista. Pilatzke, Itsaso y el propio Núñez pasearon con sus instrumentos por el graderío y se mezclaron con un público feliz y entregado.
No faltaron temas tan conocidos como Negra sombra, Camino de Santiago, Rithm Roots, A Virgen de Guadalupe, las consabidas alboradas y muñeiras o la bretona Danzas macabras, con la que el Price se llenó de personas cogidas de los dedos a modo de fest noz bretón.
Poseedor de un premio Grammy junto a sus maestros The Chieftains, Carlos Núñez ha compartido escenario con artistas como Bob Dylan, Joni Mitchel, The Who o Lou Reed. En sus discos han colaborado multitud de músicos, como los propios Chieftains, Dulce Pontes, Kepa Junkera, Ryuichi Sakamoto, Altan, Solas, Juan Manuel Cañizares, Carlinhos Brown, Lenine, Adriana Calcanhotto… Hace décadas que traspasó los límites del folk y la música tradicional para pasear por el mundo espectáculos totales, espectáculos de masas.
Fotografías: Carlos Monje
