Diariofolk

Benito Cabrera dio el pistoletazo de salida a una programación seductora que reúne a lo más granado de la música popular de todo el país. El timplista lanzaroteño se presentó en dúo, acompañado a la guitarra por Tomás Fariña, para hacer un recorrido por el folclore canario con incursiones en algunas conocidas melodías del otro lado del Atlántico. La propuesta de Cabrera sigue la estela de otros grandes timplistas que demuestran la versatilidad del timple y consiguen llevar el instrumento a un papel solista y dar el salto a otros estilos musicales.
El concierto comenzó con una tarantela para sumergirse de inmediato en el rico folclore canario con La Danza del Trigo, la nana Arrorró del sur –composición de Teobaldo Power y a la postre himno de Canarias- una folía y una isa con la colaboración de David Muñoz, voz solista de Los Sabandeños, y la percusión de Eliseo Parra.
No faltó la omnipresente conexión canaria con Latinoamérica, con los sonidos venezolanos de la famosa Moliendo café y la bossa nova de Vinicius de Moraes y Antonio Carlos Jobim, Agua de beber, que contó de nuevo con la potente voz de David Muñoz y donde destacó la improvisación al timple de Cabrera.
Sonaron también composiciones propias, como la delicada obra maestra Nube de hielo, que cierra el abanico de colores que el timple puede ofrecer en las manos de intérpretes como Benito Cabrera.
Músicos:
Benito cabrera, timple
Tomás Fariña, guitarra
David Muñoz, voz

El festival Tránsitos Galileo no podía emprezar mejor, pero en su primera jornada aún guardaba un tesoro: la actuación de Eliseo Parra con su banda. El maestro, por el que pasan todas las percusiones -bodhran, pandereta, pandero cuadrado, guitarra, sartén, almirez- consigue que su sonido tenga una gran carga ancestral y magnética. Es un maestro del ritmo y en sus arreglos, el ritmo es la columna vertebral.
El repertorio seleccionado para el concierto en la sala Galileo contaba con temas muy conocidos: El reloj de Valdetorres, Suite del Rebollar, El Payo, la Jota del Chato, El Brillante, Van por el aire, La llave de la alegría…, un atracón de ritmos tradicionales entrelazados con multitud de sonidos que sólo esta reunión de excelentes músicos puede conseguir.
El vallisoletano invitó a Benito Cabrera al escenario en una reunión de lujo que sirvió como muestra del talante mestizo de este festival, que nació en Canarias para mostrar pinceladas de todas nuestras culturas. Juntos tocaron unas memorables folías y el tema canario Fúlgida luna.
Entre los temas más nuevos, Eliseo Parra y su banda interpretaron Consolación bendita, del disco Canciones tradicionales riojanas, que conjuga dos elementos muy difíciles de unir: el jazz y la forma de canto tradicional. La ocasión dio además una de las oportunidades de lucimiento a Eduardo Laguillo, quizá el músico más jazzero de la formación.
A Eliseo Parra le gusta la jarana y es difícil que un tema, por tranquilo que sea, no termine en una fiesta de ritmos con todos los instrumentos en acción. No es difícil cuando se cuenta con la ayuda de grandes percusionistas como Aleix Tobías y Pablo Martín, a los que añade sus melodías Xavi Lozano con su despliegue habitual de instrumentos de viento imposibles, entre los que se cuenta la ya famosa valla metálica de obra, de la que sabe extraer los sonidos más delicados para sorpresa del público.
Eliseo Parra no se estanca nunca y siempre tiene un pie por delante en la evolución musical. En línea con su talante, para este concierto contó como invitado con Dani Pulmón, beatboxero o, lo que es igual, percusionista vocal, que encajó perfectamente con la banda.
Por encima de todo el espectáculo se siente el toque único del maestro Parra, que mantiene la voz en plena forma e irradia buen rollo y cercanía, tanto a sus músicos como a los espectadores. No nos cansamos de decir que esta formación es de lo mejor que se puede ver encima de un escenario en este país, y así llevamos 15 años.
Músicos:
Eliseo Parra, voz, guitarra y percusión
Eduardo Laguillo, teclado y armonio
Xavi Lozano, flautas e instrumentos de viento
Pablo Martín, percusión
Josete Ordóñez, guitarra
Guillem Aguilar, bajo
Aleix Tobías, batería y percusiones
Invitado: Dani Pulmón, beatbox

Fotografías: Carlos Monje