Diariofolk

Dejada atrás la celebración de sus cincuenta años de carrera artística, Maria del Mar Bonet ha vuelto a superarse con un trabajo que aparentemente es de lo más sencillo, pero que alcanza unas cotas de calidad a las que no nos tenía acostumbrados desde hacía algún tiempo. Porque este CD grabado en directo junto al guitarrista y cantante Borja Penalba -y, no lo olvidemos, el percusionista Antonio González- en el teatro Micalet de València, es de lo mejor que ha hecho la mallorquina en su larga trayectoria.

Maria del Mar y Borja ya llevaban unas cuantas temporadas actuando cuando decidieron dejar constancia de su labor conjunta, y acertaron de pleno, porque esta colaboración merecía tener un documento que diera testimonio de su acierto y su brillantez. Y los conciertos valencianos constituyeron la mejor oportunidad para hacerlo, porque ella hace gala de una voz y una capacidad interpretativa como pocas veces se le ha visto y oído en vivo, y él, que no es ningún novato -ha hecho carrera acompañando a los más diversos artistas-, demuestra una gran versatilidad creativa, no solo con las seis cuerdas, sino también cantando en solitario o a dúo con la protagonista del disco.

Podríamos dividir el repertorio de este trabajo en dos partes: los temas ya conocidos, algunos muy antiguos y felizmente recuperados, y las no menos reveladoras novedades. En primer lugar, habría que decir que la selección del repertorio es francamente buena, y en segundo lugar cabría añadir que, por eso mismo, se hace difícil decantarse por unos u otras. Entre las joyas de siempre, Em dius que el nostre amor -letra de Joan Vergés con música de Toti Soler-, Alenar -con una buena adaptación que no intenta competir con la original de Paco Cepero-, Homenatge a Teresa -el gran clásico de Ovidi Montllor-, la magnífica y poco recordada No trobaràs la mar o la reivindicativa Què volen aquesta gent. Y en cuanto a las composiciones estrenadas, o casi, tres poemas: uno de Pere Quart y musicado y interpretado por Borja, Jo d’aquesta cançó en dic Ripoll, dedicada a la propia Maria del Mar; otro de Vicent Andrés Estellés, No puc dir el teu nom; uno más de Joana Raspall, en este caso adaptado por Juan Valderrama -sí, el hijo de Juanito-, Podries, y una canción del grupo ibicenco Projecte Mut, Illa.