Diariofolk

Evangelina Sobredo (1948-1976) fue muy conocida en el Estado español durante la primera mitad de los años setenta bajo el nombre artístico de Cecilia. Y ahora, Lídia Pujol ha querido reivindicar su memoria y su obra, recordándonos que “no hizo canción protesta ni quiso convencer a nadie de nada”, aunque, a su manera, también se la jugó.

Conversando con Cecilia recupera buena parte de los temas más populares del repertorio de la cantautora fallecida prematuramente, en muchos casos cambiando radicalmente sus arreglos, como si desnudara las canciones para volverlas a vestir, y también recupera alguna de sus composiciones que fueron parcial o totalmente censuradas. Este es el caso de Mi querida España, que aquí aparece con su letra original: “Mi querida España./Esta España viva,/esta España muerta”, y no el “esta España nuestra” impuesto por el censor de turno.

La conversación entre Lídia y Cecilia incluye otros temas famosos como Ramito de violetas, Amor de medianoche y Nada de nada, pero, curiosamente, Dama, dama ha quedado fuera de la selección. Además, la intérprete catalana ha optado por envolver este conjunto de versiones con una serie de piezas de tipo espiritual, recurriendo a versos musicados de Teresa de Jesús, Jacint Verdaguer, Maria-Mercè Marçal e incluso algún canto védico.

Dani Espasa (piano), Pau Figueres (guitarras), Carlos Montfort (violín). Xabi Lozano (instrumentos de viento), Dídak Fernández (percusión) y Miquel Àngel Cordero (contrabajo), entre otros músicos, han acompañado a Lídia Pujol en la elaboración de este disco. Los tres primeros también han participado en la producción.