Diariofolk

En su nuevo disco, el guitarrista valenciano Ximo Tébar rinde homenaje a una serie de autores clásicos del jazz a través de unos cuantos estándards que han sido tratados muy a su manera; es decir siguiendo las pautas del mainstream progresivo que ha ido cultivando durante los últimos años en Nueva York, a las que ha añadido algo -o bastante- de su cosecha propia: el denominado son mediterráneo.

Los temas seleccionados son solo ocho, pero sus nombres tiran de espaldas: Caravan, de Ellington y Tizol; Take five, de Paul Desmond; United, de Wayne Shorter; Goodbye pork pie hat, de Charles Mingus; Con alma, de Dizzie Gillespie; Poinciana, de Nat Simon; Bemsha Swing, de Thelonious Monk, y, aunque en su concepción original no tenga nada de jazzístico, En Aranjuez con tu amor, de Joaquín Rodrigo.

En esta colección de composiciones, Tébar ha querido destacar un par, que son las que dan título al disco, a las que ha imprimido más ese son mediterráneo que es marca de la casa, calificándolas a las dos con el curioso apelativo de “pseudo-bulerías”. Y en ambos casos ha contado con la ayuda de invitados excepcionales: en el caso de United, la flauta de Jorge Pardo, y en el de Con alma, el piano de Arturo O’Farrill.

Además, para la grabación de este CD, el guitarrista ha dispuesto de una serie de colaboradores -más de quince- escogidos entre lo más granado de la escena jazzística neoyorquina y también valenciana: del batería Nathaniel Townley y los bajistas Dominique di Piazza y Boris Kozlov, al trompetista David Pastor y sus propios hijos, Claudia y Guille Tébar, que aportan sus voces a los aires brasileños de Ponciana. Por cierto, Guille también toca el sintetizador, pero bajo el seudónimo de Will Martz.