Diariofolk

El percusionista Antonio Sánchez Barranco nos presenta Caprichos del destino, el primer disco a su nombre, avalado por un currículo intachable en formaciones imprescindibles, como Tactequeté y Coetus, y numerosas colaboraciones con lo más granado de la música española, desde Miguel Poveda a Eliseo Parra.

El motor principal de este trabajo es la percusión, tanto de instrumentos musicales de los cinco continentes, como de otros objetos más o menos estrambóticos (como una guadaña o un tambor de lavadora). Las canciones están además cargadas de efectos, ambientes sonoros y excelentes aportaciones vocales a cargo de Judith Neddermann, el cubano Mel Semé, el marroquí Mohammed Boud y el guineano Mû M-bana. Completan la nómina de ilustres colaboradores Xavi Lozano y Martí Serra con los vientos, el bajo eléctrico de Guillem Aguilar y las cuerdas Mohamed Soulimame.

Para presentar este repertorio en directo, Barranco ha formado The Drumming Society, un grupo compuesto por excelentes músicos como Aleix Tobías, Angelo Mahenzane, Mel Semé, Joel Sánchez, Anna Tobías, Didac Ruiz, Marc Vila y Sol Homar.

El percusionista se confiesa deudor de grandes músicos como Nana Vasconcelos, Airto Moreira o Trilok Gurtu, y la influencia de estos maestros rezuma por los cuatro costados en este trabajo. Caprichos del destino es un disco de atmósferas mágicas, con sonidos estimulantes y relajantes a partes iguales; uno de esos discos que se agradecen por sacarnos del marasmo musical predominante, un revulsivo.