Diariofolk

La historia de Manel Joseph es única e incomparable. De entrada, tal vez su nombre no sea muy popular, pero si digo que durante cuarenta años fue el vocalista de la Orquestra Plateria, todos exclamarán: “¡Ah, és él!”. Pues si señor, es él, el hombre que, entre otras muchas cosas, popularizó Pedro Navaja en el Estado español. Pero la historia de su carrera va bastante más allá de lo que hizo al frente de una formación que fue concebida para actuar la noche de fin de año de 1974 en la mítica sala Zeleste de Barcelona y que prolongó su actividad durante cuarenta años.

El disco 50 estius quiere hacer referencia a ese medio siglo de trayectoria musical de Manel, durante la cual ha tenido de la oportunidad de formar parte de un grupo pionero de finales de los sesenta como fue Dos + Un, de colaborar con diversas formaciones de la Ona Laietana en los setenta, y de acompañar, entre otros, a Sisa, Ía & Batiste, Gato Pérez o María del Mar Bonet. El CD rinde homenaje a todos esos años y todos esos hitos y muchos más, juntando grabaciones realizadas para la ocasión y otras piezas recogidas de elepés y singles diversos.

Entre los temas inéditos se incluyen algunos de cosecha propia, como Recordo el Gato, donde rememora los tiempos en que el Park Güell “era casa nostra” -ahora está invadido por los turistas-, y algunas versiones, como la del tema de Toti Soler No em val hacer viscut. En estas cinco composiciones le secundan viejos compañeros de fatigas como Xavier Batllès, Pep Torres, Quim Ollé o Jordi Batiste.

El resto del trabajo consiste en una muy personal y precisa selección de temas ya grabados en anteriores discos, como el recordado Ballautors de la Plateria, donde llama la atención la recuperación de la emblemática Se’n va anar con que la extraña pareja formada por Raimon y Salomé ganó en 1963 el premio de la Canción Mediterránea, con el consecuente escándalo por tratarse de una canción en catalán. También aparecen en esta tanda una recordada pieza del mencionado Gato Pérez, La curva del Morrot, otra grabada junto al grupo de jazz clásico La Vella Dixieland, y la marchosa L’ocellot del mal pèl, incluida en el no menos trascendente elepé La Boqueria, del grupo de jazz y salsa Mirasol/Colores.